CÓMO RECICLAR MATERIALES CON UNA ENCUADERNACIÓN COPTA

Copta con piezas de Lego, de Moonlightbindery

Hoy voy a hacer una entrada sencilla y aprovechable, sin demasiada lectura, para no ser siempre tan "intensa". Os quiero hablar un poco más profundamente de cómo usar materiales reciclados en encuadernaciones coptas. Ya os he hablado aquí sobre los estilos que se están utilizando hoy en día con esta técnica. Esta entrada de hoy, más que un manual para coser copto, trata de enseñaros a ver qué tenéis alrededor y qué utilidades se le pueden dar. Para ello, vamos a hacer un repaso visual sobre las libretas que hay ahora mismo en la red que hacen uso del reciclaje. Hay unas cuantas propuestas interesantes. Como siempre, aquellas fotografías que no me pertenecen llevan a pie de foto el nombre de su autor. Muchas a todos por compartir en Internet vuestra imaginación e ideas.
Y ya, sin más dilación, ¡comencemos la visita!

Los pobres ordenadores:

Con letras de teclado, de perpetualkid

Con disquettes

 A mí los ordenadores no me duran más de dos o tres años, así que es normal que en mi casa haya trozos de ordenadores muertos que todavía no he tenido tiempo de tirar en el reciclaje especial. Pues bien, por qué no convertilo en libretas? Las tapas con letras de teclado pegadas es una preciosidad, y las disqueteras reutilizadas extremadamente útil. ¿Quién tiene hoy en día un lector de disquettes? Eso sí, antes de despiezar, comprueba que no haya datos interesantes dentro, que luego vienen los disgustos.

Yo me lo como, yo me lo encuaderno:

Ni idea de cómo sabe esa cosa,
de Donna Meyer

Chocolaaaaateeeee, de 
Donna Meyer

¡No lo tires! ¿No ves que puede ser una encuadernación copta? ¿El qué? Pues los envases plásticos de chocolatinas y cosas parecidas. Date cuenta de que en esta estructura de libreta no necesitamos que el papel resista las aperturas de la zona de franquicia. Así que, con que el papel se doble y se pueda pegar, es más que suficiente. Los envases de chocolatinas son usados porque suelen ser rectangulares.

Dale una nueva vida a tus antiguos juegos de mesa:

¡Bingo! de IDCarnets

Scrabble, de Shala's Beadwork

Son muy aprovechables, porque los viejos juegos de mesa se hacían con cartón, lo que los convierte en el material ideal para realizar agujeros y coserlo, aprovechando el decorado ya existente en el juego. Haz un repaso por tu trastero, seguro que encuentras algo interesante.

¡No tires los papeles!

Guía, de IDcarnets

Publicidad de hamburguesería,
de Donna Meyer

Aunque sea publicidad. Si tiene una imagen que te gusta, ¿por qué no convertirlo en una portada? Lo mismo con los periódicos usados, o las guías telefónicas. A partir de hoy, abriréis vuestro buzón a la espera de que os regalen un buen papel, ya está bien el cansarse de tirar el dichoso buzoneo.


Pobre música:

Casette, de Erin Zamrzla

Vinilo, de Donna Meyer

Con los cambios que han ocurrido en los formatos musicales, los antiguos formatos son carne de cañón. Yo con las casettes no tengo ningún problema (y menos si son de Madonna), pero... ¡por favor!, sólo usar vinilos que no tengan ninguna calidad, como alguno que esté demasiado rayado para poder salvarse, o grupos que sean dignos de la hoguera. Pero es que yo amo mis vinilos, y me duele verlos convertidos en otra cosa.

Y pobres libros:

Tapas de libro, de Donna Meyer

Postales, de Donna Meyer

 Y si me duele ver discos reciclados, no os digo lo que siento encontrarme con portadas de libros. Por favor, por todos los santos de la encuadernación, sólo hacer uso de antiguos libros si no tienen ninguna solución su interior (se ha mojado, comido por ratones, roto) y no tiene valor alguno. Y lo mismo digo de las postales. No es cuestión de estropear materiales que tienen valor por sí mismos.



Juguemos al Lego:

Lego

Un diseño diferente de Lego, de
Brooklyntonia

Hay unos cuantos ejemplos por la red. Los estilos decorativos son múltiples, porque aprovechamos que se pueden colocar piezas sobre la base, así que las decoraciones se convierten en "quita y pon". Tened cuidado a la hora de agujerear el plástico, ya que hay que hacerlo a bajas revoluciones para que el plástico no se pegue a la broca (con lo peligroso que puede llegar a ser eso). Recomiendo también utilizar unas gafas protectoras.

La naturaleza:

Unas conchas

Un trozo de madera, de Tanja Sova

Un trozo de madera, una concha grande... Todo lo que se pueda agujerear, sirve como portada.
Y hasta aquí la entrada de hoy. ¿Tenéis alguna otra idea de la que no haya hablado? Cualquier comentario es bienvenido. ¡Nos vemos!