Encuadernación japonesa con cosido cruzado

Álbum japonés con cosido cruzado

 Hoy vengo a hablaros de mi libro. Bueno, de mi libreta. Se trata de un álbum con cosido al lomo, estilo japonés, pero con un cosido cruzado (como si fuera una bota). El papel interior es Guarro para pintar con acuarelas, y está realizado con escartivanas por separado, de tal forma que cada cuadernillo está formado por una hoja doblada, cosida a la escartivana, que se puede llegar a quitar y poner otra si se quiere. Se ha recubierto con una piel de cabra color azul, con una decoración en forma de flor, que está en relieve y tintada. En estas líneas vamos a ver algunos de los trucos que yo utilizo para realizar un álbum de este tipo.

Papel para acuarelas Guarro

Piel de cabra de color azul

Lo primero de todo es escoger bien el papel con el que trabajar. Como se trata de un álbum diseñado para pintar con acuarelas, se ha realizado con un papel Guarro justamente diseñado para eso. Hice cuadernillos de una hoja doblada a la mitad para que, si el pintor quiere quitar un dibujo, pueda separar la doble hoja sin tocar el resto. Lo que tiene que darse cuenta es de si está pintando por la parte de atrás del cuadernillo, que es donde se ve el gofrado con el nombre del papel. Para recubrir el álbum escogí una piel de cabra de un bello azul marino, muy fina, que no necesitará ni chiflar.

Escartivanas cosidas a los cuadernillos

Flor hecha con pasta imitación plomo

Después uní los cuadernillos a escartivanas por separado. Como digo, de esta forma se puede quitar un cuadernillo y coser otro a la escartivana, sólo aflojando un poco el cosido del lomo. Además, permite que el álbum se abra del todo, para que sea más fácil pintar en él. Corté los cartones a medida, y en el de la portada puse el dibujo de una flor, que luego contorneé con pasta que imita el plomo, con la que se suelen hacer vidrieras. Esta es una técnica que me inventé para hacer volúmenes más finos que con cartón o cuerda. A cambio, el grosor no es tan uniforme como con las otras técnicas.

Preparando el engrudo mientras seca
la pasta

Corte de la piel, dejando unos 2 cm
alrededor

Piel pegada sobre la tapa

Piel pegada sobre sí misma

Hay que esperar a que seque la pasta, y luego se pega la piel, con engrudo. Lo que hago es preparar bien el engrudo mientras se seca la flor, y voy cortando la piel. En este tipo de álbumes el cartón trasero va entero, y el delantero está formado por dos piezas: una en la zona más cercana al lomo, y otra el resto de la tapa. Pero a la hora de cortar la piel, la pieza de la portada y la de la contraportada, serán iguales. Para pegar la piel con el engrudo, le doy una capa, doblo la piel sobre sí misma, y espero. Cuando aún no se ha secado del todo, le vuelvo a dar de nuevo, y ya pego sobre el cartón. Repaso primero con una tela, para que no queden grumos ni pliegues, y meto la pieza en prensa, con dos tableros, y un trozo de "plastazote" sobre la tapa. El "plastazote" es una especie de esponja semirígida, que hará que la piel se adapta al volumen que hemos hecho. Aviso que es un material caro, aunque el resultado que da es increíble. Si no se tiene, pues entonces hay que estarse un buen rato marcando contornos con la plegadera.

Arrugando la esquina

El cartón doblado por la piel

Tras secarse la tapa, pasamos a pegar los bordes, y hacer los acabados de las esquinas. En esta ocasión, como era una piel muy fina, hice una esquina "arrugada", sin necesidad de chiflar. La piel empezó a "tirar" del cartón, como es normal. Sin embargo, decidí no poner un papel de tiro, porque no tiraba demasiado y el papel que iba en la guarda era uno pintado al engrudo, que ya era bastante resistente.

Papel al engrudo en la guarda

Relieve tras usar el "plastazote"

Tal y como había pensado, al poner el papel de la guarda y colocar los cartones en la prensa, las tapas quedaron rectas. En las fotos podemos observar cómo queda el relieve hecho con la pasta, tras usar el plastazote y antes de pintar la flor.Fijaos cómo queda de marcado, y eso que se trata de una piel que no ha sido chiflada en ninguna zona.

Agujeros marcados con punzón

Agujeros hechos

Después me dispuse a hacer los agujeros para los cosidos. Los hice con una plantilla y una troqueladora de mesa. Estos reyes pido unas brocas para papel, porque no vuelvo a hacer agujeros de uno en uno. Nada mejor que unas brocas para papel y realizar los agujeros en todo el bloque al mismo tiempo.

Herramientas para pintar

Fondo en blanco

Tras terminar con los agujeros, termino el decorado de la tapa. Para pintar sobre una piel ya teñida me decido por usar tintas Stazon, extendidas con bastoncillos "fantastix". Primero se coloca un capa de tinta blanca, yo uso la de Adirondax, que es la más cubriente que conozco y que tiñe perfectamente sobre cualquier superficie, aunque sea una piel ya tintada, como es el caso.

Tintado de los colores claros

Tintado de los colores oscuros

Con la base ya blanca y seca, podemos tintar encima en los colores que queramos. He usado colores claros para las zonas altas, y más oscuras para las del fondo. Termino la decoración poniendo polvos de embossing de color bronce en la zona central, y dos gotas de "Mod Poge dimensional" en la hoja. Dejad que el Mod Poge se seque al aire, por experiencia propia sé que no se le debe meter pistola de calor.

Portada ya terminada

Álbum abierto

El cosido es como el de una bota: en mi caso, bajo haciendo "zetas", y luego subo de nuevo igual, hasta atar en la zona superior. Este cosido queda también bien si se hace con lazos mucho más anchos. En nuestro caso es una tira de serraje. Así nos queda un álbum hecho en piel, que se abre por completo, con un decorado en la portada de una flor dimensionada, y un cosido en el lomo al estilo japonés.
¡Espero que os haya gustado!