Dentro de las diferentes técnicas que uno puede usar a la hora de pintar papeles al engrudo, en esta ocasión vamos a tratar sobre las herramientas para extender y quitar la pintura. Primeramente apuntar que suelo trabajar con pinturas acrílicas Titan-Goya, engrudo hecho con trigo, y carragenina (mirad la entrada que he hecho sobre cómo se hacen los papeles al engrudo, donde explico para qué sirve cada uno de estos elementos). La pintura, el tipo de engrudo y el diluyente escogidos van a influir en los acabados de nuestros papeles, así que tenedlo en cuenta a la hora de intentar reproducir alguno de los papeles que vais a ver aquí.
Extender la pintura:
La forma en que extendamos la pintura sobre el papel va a crear ya una serie de texturas y distribución del color que puede influir en el acabado de nuestro diseño. Lo más general es utilizar brochas y pinceles. Las brochas, a su vez, pueden ser planas o redondas, mayores o menores, con distintos materiales y largo de las cerdas.
Brochas
Brochazos grande
Igualmente va a influir en el acabado la forma de mover las brochas: recta de un lado a otro, cruzando líneas, en movimiento caótico, circular, aplastando la punta... Por ejemplo: el estilo de Carlos Rey es utilizar pequeños pinceles con distintos colores, que va distribuyendo de forma cruzada. Mientras que el papel que aquí muestro, lo realicé con una brocha redonda grande, haciendo movimientos de 8. Lo que hay que tener en cuenta es la cantidad de engrudo que estamos depositando sobre el papel. Es decir, si vamos a utilizar 15 colores, unos cruzados sobre otros, usemos pinceles y engrudo muy diluido, para no "cargar" demasiado el papel. Ahora bien, si vamos a trabajar con un solo color, sería una pérdida de tiempo extenderlo muy diluido y con pincel.
Esponja en paleta, o pincel paletina de espuma
Líneas cruzadas, de Mª José Illanes
Otra forma corriente de extender la pintura es con esponja. Las esponjas son un universo complejo, ya que unas absorben más o menos, son más o menos duras, pueden encontrarse por separado, en paleta o en rodillo... Para extender vienen muy bien las de espuma sujetas con un palo. Al igual que con los pinceles y brochas: pueden extender la pintura de forma recta, a brochazos aislados, con la punta... Sin embargo, con una esponja cuadrada, la distribución en línea recta queda mucho más definida que con las brochas. Por eso esta es la mejor forma de realizar fondos con colores a rayas, ya sean en paralelo o cruzándose en angulo recto. El truco para conseguir un papel como el que pongo de muestra es primero extender los colores, si se quiere con brocha, dejando el más oscuro en uno de los laterales, en este caso como se ve en las rayas verticales. Y luego pasar la espuma, en horizontal, arrastrando el color oscuro que se superpone a las rayas verticales.
Quitar la pintura:
Mis trozos de conglomerado y cartón laminado
Con conglomerado laminado
La mayoría de los diseños que vamos a ver hechos con papeles al engrudo, se realizan quitando zonas de pintura. Los más clásicos utilizarán cartón o madera: un rectángulo de cartón, un trozo de pinza, la parte de atrás del pincel, el cartón del rollo del papel higiénico... A mí me gustan los cartones y conglomerados con una de las caras laminadas. Esto se debe a que los cartones sin laminar se ablandan enseguida, y arrastran la pintura, más que levantarla, según se van utilizando. La zona laminada endurece lo suficientemente el cartón o el conglomerado como para quitar la pintura durante más tiempo, dejando líneas muy marcadas de arrastre.
Espátulas de goma
Espátulas de silicona
Otro gran clásico son los peines, que se pueden hacer recortando el cartón, o comprando peines de silicona. No recomiendo los peines de plástico duro, porque pueden llegar a romper el papel. Celemín usa los peines de espátula de pintor (que suelen ser triangulares). Yo los tengo de la marca "APA" (que tiene también uno para simular madera), y Royal&Langnickel. Los hay con más o menos número de líneas, más o menos gruesas, e iguales o variando de tamaño. Éstos los suelen utilizar los pintores de brocha gorda. Vamos a encontrar otra versión más "ergonómica" en la colección de espátulas y pinceles de Catalyst de silicona, diseñados para pintores de brocha más fina, para trabajar con Gesso o alguna otra pasta. Los peines nos permiten realizar mil y una tramas, dependiendo cómo los movamos, los giros de muñeca, líneas seguidas o no, combinación de distintos grosores... Los que quieren repetir patrones exactos, utilizan peines de la medida del papel, como si fueran los peines de agujas de los papeles al agua (con un gran listón de madera sirviendo como base). También se pueden hacer peines uniendo "puntas", es decir, coger juntos tres trozos de pinzas, tres maderas de pinceles o varias agujas romas. Por ejemplo: cojo varias agujas (ojo, de las que no son puntiagudas), y separo un poco sus puntas mientras las agarro unidas por el otro lado. Así consigues un pequeño peine de puntas muy finas.
Peines en vertical, con giros de muñeca a izquierda y derecha
Pinceles de silicona de Catalyst
Pinceles para modelar
Para líneas trabajadas de una en una, existen cada vez más pinceles con punta de silicona. Los de Catalyst son muy grandes, y me imagino que terminaré por recortarles parte de la madera para poder manejarlos mejor. Entre ellos hay uno triangular, que va muy bien para jugar con giros de muñeca para cambiar una línea de más gruesa a más delgada y al contrario (Celemín tenía una rasqueta de hielo que hacía esta función a las mil maravillas, pero no he encontrado nada igual a la venta). Para trazos muy finos están los pinceles para modelar, que tienen una parte en bisel y otra no. Esta doble cara nos permite realizar pequeños trazos que combinen zona de arrastre con zona de levantamiento de pintura, dependiendo de la la parte del pincel que usemos.
Punta triangular de silicona
Rodillo de pintor de pared
Rodillo de Stampin Up, y rodillo para textura de Sculpey
Una herramienta que nos facilita el trabajo son los rodillos. Existen de varios tipos: los de pintor de pared, los de sellos de caucho, y los de marcado de pasta polimérica (o pasteles). Estos últimos tienen un plástico muy duro, que no dan los mejores resultados. Gracias a los rodillos, podemos repetir una misma trama de forma rápida. Los rodillos de pintor soy muy caros y los baratos de los chinos no tienen el mismo "agarre" (es decir, el plástico que utilizan no recoge la pintura igual que los caros). Así que os recomendaría que os compraseis un roller de Stampin Up, que está diseñado para entintar un sellos de caucho, pero que viene a las mil maravillas para trabajar con engrudo (los tenéis en Ebay). A la hora de utilizar estos roller de Stampin Up hay que tener en cuenta dos cosas: empezar y terminar siempre fuera del papel (para que no se vea la "huella" de donde posamos el sello), y observar dónde está la "unión" del sello" (que es una zona sin dibujo que no queremos que se vea en nuestro papel).
Rodillo de Stampin Up con mariposas
Utensilios de cocina reutilizables
Básicamente, nos servirá cualquier utensilio que sea de plástico, silicona y gomas semejantes. Un rodillo de cocina, aunque sea de madera, nos servirá para pegar sobre él lo que queramos utilizar como una trama continua (por ejemplo: atarle gomas de plástico, o pegarle con cinta de doble cara papel de burbujas...). No os recomiendo la goma Eva para estos menesteres, porque lo que queremos es un material que absorba la pintura húmeda y se la lleve consigo cuando lo levantemos (y eso no lo conseguiremos con la goma Eva). Mismamente, un papel algo grueso se puede arrugar dejando muchos picos, y se pasa por encima de la pintura. Y ya tenemos una textura. Todo es cuestión de mirar a nuestro alrededor, y ver qué opciones tenemos a mano.
En nuestro canal de youtube podrás ver vídeos de cómo usamos estas herramientas:
Y también puedes conseguir nuestro curso online sobre cómo hacer papeles al engrudo. Si clicas en el botón de "Quiero informarme" leerás una información concisa sobre todo lo que encontrarás en este inmenso curso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario